Hoy os presento una herramienta que he realizado para mi uso y disfrute. Es tosca y bruta, como un Troll , pero me gusta
Hoy en día, en mi profesión, el martillo ha pasado de ser una herramienta fundamental (clavar clavos era algo imprescindible en la construcción y montaje de decorados) a ser algo que utilizamos para meter pasadores en la tarea de ensamblar piezas de decorado.
La contrucción de los decorados ha evolucionado y ha convertido los martillos en algo grande y pesado que llevamos para usar realmente muy poco y exclusivamente con decorados de madera (cada vez más escasos).
Yo llevaba un tiempo deseando hacer una herramienta que me librase de llevar el martillo al cinto y finalmente me he dado el capricho.
He realizado una barra de uña de doble cabeza, con masa y contundencia suficiente para golpear los susodichos pasadores y extraerlos cómodamente también.
Los dos extremos de la palanca tiene ranuras para sacar clavos, ambas de tamaño distinto para abarcar todos los tamaños de puntas que usamos.
La parte de palanca próxima al encordado tiene las puntas redondeadas para que no moleste al martillear.
También tiene dos ranuras, una de ellas apta para puntas de hasta 3mm de diámetro, con el objetivo de poder doblarlas y convertirlas en alcayatas o pasadores "de fortuna".
La otra ranura es para doblar pletinas de hasta 6mm y también sirve de adaptador de puntas estandar para atornillador (1/4 de pulgada).
Tiene dos agujeros en el cuerpo, utilizando el más próximo al extremo podemos doblar varillas de hasta 8mm de diámetro para realizar un pasador o enderezar uno torcido, el otro agujero se puede usar para ponerle un fiador si así se desea.
El mango está realizado con paracord 550 negro y paracord GITD (glow in the dark) tratado con cianocrilato para protegerlo de la suciedad y del roce del uso como palanca, que me consta que acaba con el encordado sin tratar con bastante facilidad...
El largo total es de 16 centímetros y el grosor es de 6 milímetros. El acero empleado es una pletina de 440 regalo de mi suegro con un acabado en falso brut de forge.
Fotos:
En la palanca acodada le he practicado unas muescas para evitar que ésta deslice al apalancar.
El encordado llega justo hasta donde no roza el suelo al utilizar el otro extremo para apalancar.
La ranura-adaptador de puntas funcionando:
Dos fotos que me gustan:
Unas fotos del encordado visto de perfil. El grip es muy bueno.
En la mano, lista para golpear esos dichosos pasadores:
Y aquí, lista para apalancar con el otro extremo:
Y esta foto es para que se aprecie el paracord GTID en todo su esplendor. Una herramienta fácil de localizar a oscuras es importante en un teatro, donde las condiciones de luminosidad suelen ser precarias.
Pues eso es todo, estoy esperando hacerle la funda de kydex correspondiente y al cinto de trabajo ...
Espero que os guste.
Un saludo!!!
Hoy en día, en mi profesión, el martillo ha pasado de ser una herramienta fundamental (clavar clavos era algo imprescindible en la construcción y montaje de decorados) a ser algo que utilizamos para meter pasadores en la tarea de ensamblar piezas de decorado.
La contrucción de los decorados ha evolucionado y ha convertido los martillos en algo grande y pesado que llevamos para usar realmente muy poco y exclusivamente con decorados de madera (cada vez más escasos).
Yo llevaba un tiempo deseando hacer una herramienta que me librase de llevar el martillo al cinto y finalmente me he dado el capricho.
He realizado una barra de uña de doble cabeza, con masa y contundencia suficiente para golpear los susodichos pasadores y extraerlos cómodamente también.
Los dos extremos de la palanca tiene ranuras para sacar clavos, ambas de tamaño distinto para abarcar todos los tamaños de puntas que usamos.
La parte de palanca próxima al encordado tiene las puntas redondeadas para que no moleste al martillear.
También tiene dos ranuras, una de ellas apta para puntas de hasta 3mm de diámetro, con el objetivo de poder doblarlas y convertirlas en alcayatas o pasadores "de fortuna".
La otra ranura es para doblar pletinas de hasta 6mm y también sirve de adaptador de puntas estandar para atornillador (1/4 de pulgada).
Tiene dos agujeros en el cuerpo, utilizando el más próximo al extremo podemos doblar varillas de hasta 8mm de diámetro para realizar un pasador o enderezar uno torcido, el otro agujero se puede usar para ponerle un fiador si así se desea.
El mango está realizado con paracord 550 negro y paracord GITD (glow in the dark) tratado con cianocrilato para protegerlo de la suciedad y del roce del uso como palanca, que me consta que acaba con el encordado sin tratar con bastante facilidad...
El largo total es de 16 centímetros y el grosor es de 6 milímetros. El acero empleado es una pletina de 440 regalo de mi suegro con un acabado en falso brut de forge.
Fotos:
En la palanca acodada le he practicado unas muescas para evitar que ésta deslice al apalancar.
El encordado llega justo hasta donde no roza el suelo al utilizar el otro extremo para apalancar.
La ranura-adaptador de puntas funcionando:
Dos fotos que me gustan:
Unas fotos del encordado visto de perfil. El grip es muy bueno.
En la mano, lista para golpear esos dichosos pasadores:
Y aquí, lista para apalancar con el otro extremo:
Y esta foto es para que se aprecie el paracord GTID en todo su esplendor. Una herramienta fácil de localizar a oscuras es importante en un teatro, donde las condiciones de luminosidad suelen ser precarias.
Pues eso es todo, estoy esperando hacerle la funda de kydex correspondiente y al cinto de trabajo ...
Espero que os guste.
Un saludo!!!
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